Territorio
Nuestra entorno
Nuestra identidad
Un aspecto interesante y diferenciador a destacar de nuestros vírgenes extra es el entorno en el que se producen. La Sierra de La Pandera que nos cobija, constituye un entorno privilegiado que se conserva “virgen” gracias a la escasa o casi inexistente explotación turística.
Los valores de estas tierras son el respeto a lo que nos da la tierra, el clima, con agradables noches frescas en verano y con nieves en invierno en la sierra, el paisaje de sierra y de olivar, la tranquilidad, la ausencia de contaminación… En definitiva la vida en contacto y armonía con la naturaleza y al mismo tiempo, la cercanía a la capital.
Río Frío, sus puras y frescas aguas invitan a subir a beber y a coger agua del manantial. De este manantial se embotellan aguas para su comercialización bajo la marca: “Sierras de Jaén”.
En nuestro entorno natural destacan parajes tan singulares y salvajes como los cañones del río Eliche.
El nombre de Jabalcuz, una de nuestras marcas de aove, viene de las míticas Termas de aguas sulfurosas que vivieron su máximo esplendor en los últimos años del S.XIX hasta la primera mitad del S.XX. Hoy lugar residencial.
El pantano del Quiebrajano , que abastece de agua de consumo a Jaén, se sitúa en un precioso entorno, escarpado, entre pinares, es escenario de la popular carrera Subida al Quiebrajano desde Jaén o un sitio de recreo para perderse y desconectar.
El municipio de Los Villares, de donde somos, cuenta con unos 6.000 habitantes. Es un municipio abierto, emprendedor, olivarero y sobre todo de carácter residencial y de descanso veraniego para los jiennenses. Hecho que le ha hecho en convertido en ciudad dormitorio para muchas personas que trabajan en Jaén y deciden fijar su residencia en él.